La DGT lo define como, el libro de mantenimiento contiene la información de la garantía y de todas sus coberturas. Y un espacio donde registrar el mantenimiento del vehículo: el kilometraje que tiene, el número de orden de la reparación, la fecha, el nombre del taller o concesionario, la matrícula. Y por último una zona para que el taller estampe su sello. Quedando apuntado si ha sido necesaria alguna reparación y si se ha sustituido alguna pieza, además de la lectura del kilometraje y la fecha de paso por el taller. De esta forma, el historial mecánico queda constatado en el libro de mantenimiento.
Además, suele constar el control de la garantía comercial, con un resumen de la cobertura explicando los datos concretos que incluye. Así como la duración de las diferentes piezas o el límite de kilómetros. En referencia a la garantía, también se suelen recoger las obligaciones por parte del propietario. También se puede entregar dividido en dos partes por una el libro de garantía y por otro el de mantenimiento.
Por definirlo más, sería un historial mecánico del vehículo, donde consta cada revisión realizada, y cuidados del coche.
El manual de instrucciones del vehículo, que debe traer todo coche nuevo, es el complemento del libro de mantenimiento. En este manual se hallan las explicaciones de todos los elementos y sistemas del vehículo, dónde se encuentran dentro del coche y cómo funcionan. Pero, además, dispone de diferentes secciones en las que se recoge los servicios de mantenimiento que deben realizarse y los kilómetros o el tiempo en que deben efectuarse: cuándo hay que cambiar los líquidos que alimentan los diversos circuitos y sustituir las piezas esenciales. Elementos que tienen una vida útil larga, pero limitada, que por seguridad se deben sustituir con el paso del tiempo y los kilómetros.
Ahora respondiendo a la pregunta no es obligatorio su uso, pero por obligación de una ley (el Real Decreto 1/2007, de 16 de noviembre; modificado en 2015, establece que todos los bienes que se comercializan tienen que acompañar «información veraz, eficaz y suficiente sobre sus características esenciales» y «las instrucciones e indicaciones para su correcto uso o consumo) te lo tienen que dar de manera online y/o físico de una forma u otra.
Sobre quien te lo debe de dar es el fabricante a través de su concesionario en la entrega del vehículo. Pero son desde todo punto conveniente llevarlos y conocer su contenido, y desde el Grupo Baysan pensamos que deberían permanecer de forma impresa con formato libro siempre dentro del vehículo, aunque se vayan implementando nuevas opciones que lleven a la digitalización.
Lo conveniente es que usemos ese libro de mantenimiento ya que está ligado al libro de garantía oficial del vehículo, en la garantía se cubren los defectos de fábrica o las averías mecánicas, eléctricas o electrónicas que no estén provocadas por el desgaste o la falta de mantenimiento. Con el libro de mantenimiento podremos tener de forma segura esta garantía cubierta ya que, si no se rellena y tenemos algún problema con el vehículo, la garantía no podrá ser usada o aplicada.
Aunque se realicen las revisiones en talleres no oficiales no pasa nada mientras te sellen el libro y te lo firmen.
Además, que si tenemos al día el libro de mantenimiento cuando tengamos un problema la información que tenga le será de mucha utilidad al mecánico.
En caso de que tengas el libro de mantenimiento digital el proceso es muy similar:
Se traslada el coche al taller para que lo revisen o se le repare una avería, cuando se termine de arreglar o revisar, los datos los trasladara a un integrador de datos que recopila, procesa, homogeniza y envía a la DGT, los datos que reflejan son revisiones oficiales, kilometraje, reformas y reparaciones.
La DGT incorpora la información recibida al Registro de Vehículos y cuando lo necesites tu o cualquier persona se podrá pedir el informe a través de las jefaturas provinciales o vía web.
Estamos o deberíamos trabajar siempre en lo de “derribar obstáculos”. NO se debe obligar a la población a que esté al día en las nuevas tecnologías. Aquí el único beneficiado en no darlas es el fabricante que se ahorra una cantidad importante de dinero en dichos libros, más el tiempo que usa la cadena profesional interviniente en asegurar que siempre permanezcan dentro del vehículo.
La ventaja de recopilar todas las revisiones del vehículo registrados se traduce en que siempre se puede demostrar ante quien lo solicita que se ha seguido cuidadosamente el mantenimiento a su debido tiempo y al kilometraje correcto.
Por el momento la incorporación de los talleres al proyecto de libro taller es voluntaria.
Puedes consultar el listado de talleres y asociaciones de talleres que están ya integrados en el servicio libro taller. Estos talleres ya envían las reparaciones y mantenimientos que realizan sobre los vehículos con los que trabajan.